Viajar en avión o en AVE ya no es un placer para una mujer o hombre que le guste cuidar su aspecto. No señor, no lo es. Antes, te ponias estupendisima de la muerte porque salias de viaje, fuera de negocios o de placer. Te maquillabas, peinabas, te ponias tus zapatos más estupendos ,abalorios... en fin, guapa reguapa, guapo reguapo. Que como dice mi madre, has de salir de casa siempre bien arreglada y con bragas limpias que nunca se sabe si te puede pasar algo ( aunque no te pase no me imagino yo salir con bragas sucias... pero bueno).

Ahora debes pensar muy mucho que carajo te pones para no acabar en el cuartito de la Guardia Civil o en su defecto medio en bolas. Porque pasar el control de seguridad es como presentarte a un casting de un videoclip porno. Acabas con las vergüenzas (como decian las abuelas) al aire. Las vergüenzas y los pies.
La sensación de ir descalza y sentirte libre creo que solo la experimentó Gandhi y el hombre del libro de la selva. En nuestro pais, en nuestra cultura, quedarte sin zapatos es sinónimo de mal rollito:
encontrar un zapato en la carretera da a entender que la piña del accidente fue considerable.
Ver un par de bambas colgadas de un cable de la luz por los cordones es sinónimo de que alguien te hizo tremenda jugada...
Ver a un mendigo sin zapatos despierta más solidaridad económica que si se calza buenas botas....
Pues en el control no hay nada peor que te digan: Señora, descálcese. Porque en ese momento te sientes ridícula. Enfundada en unos patucos de plástico que te quedan tres tallas por encima de tu número de calzado. Vuelves a la realidad de tu estatura si en algun momento quisiste engañar al personal con 4 centimetros de superioridad taconil... Tus medias quedan al descubierto (ojo con llevar pequeña carrerita que se ve desde el aeropuerto de la ciudad contigua...) o en verano, tu pedicura saldrá a relucir (por estar perfecta,o por el tiempo que hace que tus pies desconocen esa palabra...)
Además que me expliquen porque cuando llevas sandalias con cuña pero que sólo se sujetan a tu pie con una tirita fiiiiiiiiiiiiina, te hacen descalzar. Que yo entiendo que en la cuña se puede alojar un misil antiaereo, podria ser, pero con la cara de pardilla que pongo cuando paso el control, dudo mucho que ni sospechen que puedo esconder una morcilla de Burgos...
Después viene eso de los cinturones varios. Que hay que pensar Señores! (aqui sobretodo el problema es más masculino). Los pantalones deben ajustarse a la cintura y el cinturón es un elemento de seguridad psicológica y de adorno.Porque si resulta que el pantalón te va una talla o dos más grande, cuando pases el control lo harás sujetando la cintura para que no se queden al descubierto los Punto Blanco de turno, y lo peorcito de todo: cuando esperes tu bandeja para recuperar tus zapatos, tu movil, tu abrigo, tu ordenador, tu .... deberas usar las manos y los pantalones pasarán a visitar como mínimo tus cuadríceps en la parte que los une a las rodillas... a no ser que los sujetes con el antebrazo.... la postura es de lo más sexy. Palabrita del niño Jesús.

Después viene eso de que te quites el abrigo. Bien , con esta acción, dejan muy mal parado a su arco de detección. Resulta que el Sr. Abrigo es capaz de chulear al arco Pitatodo de detección de metales .Debe ser que un buen abrigo de Zara o Mango está hecho con una tecnologia capaz de albergar una 8MK-1S (lanzagranadas) sin que se note. Entiendase que la americana de un traje tiene el mismo cometido, porque si no no me explico porqué después de quitarte el abrigo debes despojarte tu americana... en manguitas de camisa en el mejor de los casos te quedas.
No se te ocurra colocarte un pasador metálico en tu pelo para recogerlo sin más. Ese moño o coleta que parece hecho en un pis pas de lo natural que te queda, te ha costado más de dos horas delante del espejo recogiendo y liberando mechones. Ahora, ingenua tu, pita cuando pasas por el control. Debes dejarlo en la bandejita. Y tu perfecto moño se convierte en un nido de ratón de laboratorio de lo enredado y mustio que se queda...
Por último, todos tus collaritos, pulserillas y demás te harán perder tanto tiempo para dejarlos en la bandeja, que el listo que vino vestido cual jugador de la NBA en pleno més de enero, es decir camiseta de tirantes y pantalón calzón, se colará sin pensarlo.
Esto de controlar si una va a provocar el holocausto en el avión está muy bien. No deberiamos dejar que vuelva a repetirse lo del 11Sept. pero los diseñadores deberían ya pensar en un modelo que te pudieses poner y quitar con todo incorporado cual serpiente que cambia la piel. Te pones el modelo con collares, cinturones etc todo cosido como si fuera un abrigo. Te lo quitas antes de pasar y te lo vuelves a colocar. Pero por favor, que mis piececillos los dejen tranquilos...