MENSAJE DE SOLOHIJOS

La Navidad es época de buenas intenciones y buenos deseos. Y es en cierta parte criticable como algunos detractores defienden, que todas estas buenas voluntades se queden en eso, voluntades. Época obligada para sentirse feliz, a menudo nos empuja a la tristeza al recordar a los que ya no están y por obligado cumplimiento debemos recordar, aunque si los echamos de menos de verdad, no hace falta que sea Navidad para sentir su ausencia.

Pero si miramos la parte positiva, hecho que marca mi caracter decidido a no caer en la tristeza más que lo justo y necesario, la Navidad nos da un punto de partida para compartir amor, dar, recibir, sin, en muchos casos, sentirnos ridiculos. Y digo ridiculos porque mucha gente no ve con buenos ojos, o no lo siente así, la manifestación física y verbal del amor. Yo creo que son pobres en inteligencia emocional. Les falta una parte importante que los mamiferos y algunos otros animales, manifiestan innatamente: el proporcionar amor y recibirlo con los brazos abiertos. A un bebé no hay nada que pueda reconfortar más que el abrazo de su madre, el olor de su papi, el beso en la mejilla, el achuchón a todas horas. Pero a un niño/a también. Y a un adulto/a TAMBIEN. Porque no nos engañemos, el abrazo y el que te digan que te quieren reconforta y cura mucho más que un cocktel de ibuprofeno y paracetamol a partes iguales.

Cuando tienes un mal dia y sin decirte nada te miran, te abrazan y te besan, parece que una corriente de energia reparadora recorre tu cuerpo. Es como si la fuerza de la pócima secreta de Asterix y Obelix te poseyera, se adueñara de tus entrañas y solo te permitiera notar alegria y paz, mezclada con pelín de ganas de llorar.

Yo tengo motivos para estar triste. Echo de menos a mi padre. Dia a dia, pero sobretodo noche a noche. Pero la vida va estrechamente ligada a la muerte, y hay que aprender a convivir con ello. Por eso, prefiero mirar adelante, acompañada del recuerdo de los que me faltan pero aprovechando la presencia de los que tengo. Feliz Navidad queridos bloggeros/as y bloggeras. Porque aunque nunca nos hayamos visto en persona, me conoceis mejor que muchos de mis amigos, y formais parte de mi vida de una manera voluntaria y participativa.

Quiero compartir con vosotros un mensaje de la revista virtual Solo Hijos. Me parece una sabia reflexión que debemos aplicar los 365 dias del año. FELIZ NAVIDAD.

Pese a las penalidades económicas, pese a los problemas que conlleva la educación de los hijos, a las enfermedades o pérdidas y pese a cualquier tristeza que haya en este momento en tu vida, vive esta Navidad como si fuera la última, disfrutando del mayor tesoro que existe en la tierra: tu familia.

¡Feliz Navidad y próspero 2012!

Nuestro deseo para estas Navidades:

Que digas a cada uno de tus hijos lo orgulloso que estás de ellos.

Que les digas que los quieres, hagan lo que hagan.

Que los abraces y los beses, tengan la edad que tengan.

Que les digas mientras los arropas por la noche lo importante que es su existencia para ti.
Que los emociones y los estremezcas solo con mirarlos.